La clase política maneja el país como un circo.
Allende La Paz, Revista Cambio Total.
La clase política
colombiana está demostrando la falta de seriedad en sus acciones. Ha vuelto un
circo de incertidumbres el más claro anhelo de los colombianos, sean del Sí,
del No o abstencionistas.
Todos queremos la Paz. Y la
paz se negoció durante 4 años. Se llegó al Acuerdo Final entre las FARC-EP y el
Gobierno nacional (representante del Estado) y se firmó en La Habana y se rubricó
en Cartagena. Ya está depositado el
Acuerdo Final para el fin del Conflicto Armado con las FARC-EP –los conflictos
económicos, sociales, culturarles dependerían del fin del Conflicto Armado- en
el país que los salvaguardará, Suiza.
Todo lo anterior se hizo
con la presencia y mirada de la Comunidad Internacional.
Así que no pueden, en aras
de satisfacer los deseos de un megalómano y fascistoide, echar atrás lo que ya
está firmado. Ello demostraría –como ya lo está haciendo- la falta de seriedad del gobierno nacional y de sus partidos políticos
que no entienden la trascendencia de la firma del Acuerdo y la entrega a Suiza.
Ante los ojos del mundo
ha quedado Colombia como una nación sin seriedad y como una más de las “bananan
republic”.
El circo de haber sometido
el Acuerdo Final a Plebiscito demuestra cómo se manejan las cosas. El presidente
Santos por querer satisfacer a AUV y montarlo en el tren de la Paz echó por la
borda el sentir de los colombianos de acabar con la Paz.
Y les demostró a los
abstencionistas la justeza de su posición de no participar en el circo
electoral colombiano porque ellos saben que en nuestro país “el que escruta
elige”.
Además, paraliza los
deseos de ayudar a Colombia con la inversion de diferentes países a la espera
de la solución del circo electoral colombiano. Las consecuencias, quizás, no
serán palpable en el futuro inmediato, pero si en el futuro mediato y lejano.
Esta situación
demuestra, una vez más, como maneja el país la élite en el poder y sus partidos
politicos. Les importa cinco
centavos manosear a la Comunidad Internacional comprometiéndola en una
negociación que llevó al Acuerdo Final –considerado un ejemplo para futuras
negociaciones en el mundo-, para después patear ese Acuerdo por la razón que no
satisface a un megalómano.
Con qué cara van a
llegar los negociadores del gobierno a hablar con las FARC-EP? Qué cara le
pondrán a la Comunidad Internacional, a Cuba, a Noruega, a Chile, a Venezuela?
Qué cara le pondrán a la ONU? Al Papa? Qué les propondrán a cada uno de ellos o
a todos ellos juntos?
Qué vergüenza. Pobre
país!
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